top of page
  • Facebook
  • YouTube
  • Instagram
imagen.png

ENFOCADOS EN SU SERVICIO


En la intimidad nosotros vamos a conocer cuál es la voluntad del Padre para nuestra vida, por eso es importante cultivar una relación con Él para que sus planes nos sean revelados. Dios no sólo nos dirá qué hacer, sino también las estrategias que debemos usar para darle cumplimiento a ese llamado que Él nos ha hecho, simplemente debemos estar apercibidos a Su voz.


Muchas veces el servicio a Dios se convierte en una rutina, se pierde el sentido porque nos olvidamos que no se trata de la obra o del servicio, sino del Dios al que le servimos, es decir, no debemos perder el enfoque, porque nada podemos hacer sino es Dios quien nos guía. Incluso en este tiempo el Señor quiere que nos volvamos al primer amor, a lo secreto, y no que seamos como la iglesia de Éfeso, que hacía muchas obras pero alejada de Él.


No se trata de servir por servir, sino de servir en lo que Dios ha determinado, porque el éxito de nuestra vida aquí será que hayamos cumplido con lo que Él nos mandó a hacer (Mateo 25:23).


En ocasiones encontramos personas que nos dicen “¿por qué no le sirves a Dios en esto o en aquello?”, pero debemos ser sabios y entendidos, nosotros no vamos a servir en lo que las personas quieran, sino en lo que Dios nos ha llamado a servirle, porque es ahí donde vamos a dar frutos para el reino.


Hay algo que también debemos tener claro, Dios nos ha regalado dones y ministerios para la edificación de su iglesia, esto lo hizo con cada uno de manera especial, por lo tanto no debemos codiciar algo que tiene una persona, porque eso hará que nos desenfoquemos; enfócate en lo que el Señor te entregó, desarróllalo y darás frutos, porque no se trata si es mucho o poco, sino de cumplir con su propósito.


Además, el cuerpo no es un solo miembro, sino muchos. Si dijere el pie: Porque no soy mano, no soy del cuerpo, ¿por eso no será del cuerpo? Y si dijere la oreja: Porque no soy ojo, no soy del cuerpo, ¿por eso no será del cuerpo? Si todo el cuerpo fuese ojo, ¿dónde estaría el oído? Si todo fuese oído, ¿dónde estaría el olfato? Mas ahora Dios ha colocado los miembros cada uno de ellos en el cuerpo, COMO ÉL QUISO”. (1 Corintios 12: 14-18)

Este pasaje de la biblia nos enseña claramente que cada uno de nosotros tiene una función especial en el cuerpo de Cristo, siendo Él la cabeza.

Nuestro servicio no es en vano


“Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano” (1 Corintios 15:58).


Servir a Dios debe ser un privilegio para nosotros, porque en medio de la multitud, a Él le plació escogernos, quizás con muchos defectos, pero es gracias al poder del Espíritu Santo que somos capacitados y moldeados para cumplir esa asignación.


Algo que Dios me ha enseñado en este tiempo es que si Él fue el que nos llamó, Él no nos va abandonar, sino que estará a nuestro lado como nuestro mejor socio para proveer TODO lo necesario a fin de cumplir con el llamado, sólo debemos confiar que a cualquier lugar donde Él nos lleve tendrá cuidado de todo, aunque a veces las circunstancias quieran mostrar lo contrario, porque incluso será un excelente escenario para probar nuestro corazón y así formar nuestro carácter.


“Si alguno me sirve, sígame; y donde yo estuviere, allí también estará mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará” (Juan 12:26).


El servicio a Dios debe ser por amor a Él no para tener un reconocimiento del hombre, lo importante es ser reconocido en el cielo como un siervo que trabaja para la expansión del Reino.


Dayana Patricia Jiménez García

 
 
 

Comments


bottom of page